Esos momentos.
Ahora es unos de esos momentos en que le echas de menos a rabiar, más que nunca. Momentos en los que desearías tenerle cerca de ti, mirarle, besarle, acariciarle. Momentos en que imaginas esas miradas, esos gestos, esas sonrisas; todos esos momentos perfectos. Momentos en los que necesitas un abrazo, pero su abrazo. Momentos en los que le necesitas. Y sobre todo, momentos difíciles.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Con un te extraño es suficiente.