Quererte tanto duele.

Quererte, quererte cada días más, contarte cada cosa que me pasa, sentirte cada vez más cercano a mí. Ver tus ojos a escasos centímetros de mi cara, y poderme perder en ellos siempre que quiera, sin ningún temor. Poder decirte que sin ti mi vida no es lo mismo, sí, que sin ti mi vida no tiene sentido. Cerrar los ojos y sentir tus labios rozando los míos, lentamente. Dejando que se conozcan.Te quiero, sí., como a nadie en el mundo. 
Notar tus labios en mi cuello, tus caricias en mi espalda, tu cuerpo cerca del mío. Notar el calor de tus manos en mi cara. Abrir los ojos y verte sonreír, notar tu mano en mi nuca, acariciándola. Sí. Y dejarte formar parte de mi mente, de mi vida, y que conozcas cada uno de mis secretos. Esos secretos que nadie nunca conoció.

Dicen que cuando existen las ganas, todo se puede.

Yo cada día lo único que quiero es solo verlo, y que me dedique una sonrisa, esa sonrisa que ilumina cualquier lugar, que podría hacer feliz hasta al más desgraciado, esa sonrisa que con solo verla te enamora. Quiero verlo y que con su simple presencia me alegre el día, que me haga sentirme la persona más afortunada del mundo solo por poder tenerlo cerca. Me gustaría pasar los días enteros contigo, no separarme de ti, y decir que los días de 24 horas son demasiado cortos, porque estando contigo se pasan volando. Pasar segundos, minutos, horas, meses e incluso años a tu lado. Levantarme cada día sonriendo y que me preguntes que porque sonrío tanto, y poder decirte que tu eres el culpable de cada una de esas sonrisas y que tú también sonrías. Que seas feliz, que seamos felices, pero eso si, siempre juntos.

Dímelo.

Necesito que me digas que estarás aquí, a mi lado, para ayudarme, siempre. Que aunque estemos enfadados, podré llamarte y hablar durante horas y que al final me digas 'Siempre estaré aquí para sacarte una sonrisa' y quiero que nos pidamos perdón y nos demos un abrazo de reconciliación. Y lo que más me importa es que me digas que nunca me dejarás de querer, que nuestras diferencias solo harán que nos queramos cada día más, y que algún día te llegaré a importar lo suficiente como para quedarte conmigo para siempre. Quiero disfrutar mucho tiempo de todo lo que significa vivir a tu lado, quiero tus abrazos y tus besos, quiero que acudas a mi cuando no sepas que hacer, y por supuesto te quiero a ti.

Quererte es lo mejor que sé hacer.

Una de las pocas cosas que tengo claras en esta vida es que te quiero. Que te quiero a más no poder, que te quiero hoy, mañana y todos los días de mi vida. Que te quiero aquí, ahora y conmigo. Que te quiero como pocas veces he querido a alguien. Sé que tú no te das cuenta, y eso me parece un poco raro, si hasta la persona más tonta del mundo se daría cuenta de esto.  Eres lo único que pido, lo único que me hace falta. Eres una persona tan insignificante para tantos y tan importante para mi. No pretendo que nadie lo entienda, porque ni yo mismo lo logro entender, pero supongo que no es cuestión de entender o no, es cuestión de querer, de  quererlo.

Lo quiero a rabiar.

Nunca olvidé aquel instante, cuando te vi por primera vez, al principio la verdad es que te vi y no me fijé mucho en ti, por lo que sabía de ti y por lo que te conocía no me caías muy bien, sinceramente no me llamabas la atención ni lo más mínimo, me parecías uno de esos chicos que van de chulos y eres todo lo contrario, nunca pensé que me llegarías a importar tanto, y a estas alturas aún me sorprendo de lo mucho que te quiero. En estos momentos eres una de las cosas más importantes de mi vida, la persona a la que no me quito ni un segundo de la cabeza, el que me quita el sueño, quien me iba a decir a mi que ese chico me iba a hacer tanta falta. A día de hoy sé que no se puede juzgar a las personas antes de conocerlas, por hablar con alguien una vez en tu vida no puedes conocerla lo suficiente como para decir que es borde o que es tonta o todo lo contrario, las personas te pueden sorprender, como me sorprendiste tú a mi, y para bien, para mi ahora eres perfecto, eres la mejor persona que podía haber ocupado ese lugar en mi corazón, ese lugar que nadie consiguió llenar, hasta que llegaste tú, y sé que sonará raro, pero esa persona que un día pude llegar a odiar hoy la quiero a rabiar, y me gustaría poder estar con él, decirle todo lo que siento, darle un beso, abrazarlo y no soltarlo en la vida.

Todo el mundo quiere a esa persona especial a su lado.

¿Por qué es tan importante tener a una persona a tu lado? Tal vez sea por miedo, por miedo de no querer estar solo en un futuro, o de que ves a tanta gente feliz junta y tu quieres tener también a alguien a quien abrazar, a quien besar, a quien querer. Puede ser que necesites a  alguien que te quiera y que te lo diga cada día. Seamos realistas todo el mundo necesita a alguien con el compartir miradas, sonrisas, caricias. Momentos únicos, momentos de dos personas, dos personas que se quieren por encima de todo. Es verdad que nadie puede vivir sin amor, es imposible, por eso yo no me creo cuando alguien dice 'No me gusta o no me gustó nunca nadie' en algún momento de tu vida te tuvo que gustar alguien, mismo cuando eramos pequeños, ¿quién no tuvo un 'novio' cuando era pequeño? Yo pienso que todo el mundo tuvo alguna vez a alguien a quien querer, y eso es así, amar es ley de vida.

Todo lo daría por estar contigo.

- Explícame ¿Cómo sabes cuando estás enamorada? 
+ Muy sencillo, porque te levantas con una sonrisa impresionante, y te acuestas con esa misma sonrisa tonta, no hay un motivo en concreto, pero tú sonríes igual, y esa sonrisa no te la quita nadie.
Cuando no tienes ganas de comer, ni de hacer nada que no sea hablar de él o pensar en él, cuando sientes esas maripositas dentro de tu estómago cuando lo ves o cuando te habla, y cuando te tumbas en la cama mirando al techo, está vacío, pero tú lo miras igual. Cuando te pones a escuchar música y todas y cada una de las canciones que escuchas te recuerdan a él, da igual de lo que vaya la canción, da igual que la letra no tenga sentido, pero tú la oyes y piensas en él de todos modos. Cuando por las noches no puedes dormir, y das una y otra vez vueltas en tu mismo eje esperando que la almohada te ayude a dormir, pero entonces cierras los ojos y aparece en tu mente su cara, con esos ojitos que te miran y te dejan sin respiración, con esa sonrisa que te alegra cada día, esa persona que te quita todo el sueño en un momento, recuerdas una y otra vez su nombre, recuerdas el mismo recuerdo hasta cien veces, pero tú sigues pensando, no te cansas. Cuando esa persona pasa de ti y sin darte cuenta comienzas a llorar, quedas anonadada al descubrir que por primera vez estás llorando por alguien, que ese sentimiento va más allá de las palabras, que detrás de ellas se esconde algo mucho mayor, lloras por él. Pero tú, le sigues queriendo igual, y seguirás queriéndolo una y otra, y otra vez más, y así días tras día.

Lo necesario para ser feliz.

¿Quieres saber por qué me gusta? Ni yo lo sé. Quizá por sus ojos. Tal vez por su sonrisa. Esa sonrisa que me hace reír pase lo que pase. Por sus pequeños enfados. Esos que tanto me desquician y que a la vez me gustan tanto de él. Sus brazos. Esos brazos que desearía que me abrazasen a cada hora. A cada minuto. A cada segundo. Sus obsesiones. Aquellas por las que no vive y tanta rabia me dan. Me gusta por su seguridad. Esa que me transmite con solo pensarlo. Y por su inseguridad. La que me asusta y me da escalofríos. Por su peculiar forma de caminar. Por ser distinto de los demás. Por tener personalidad y ser siempre él mismo. Por ser simplemente él. Porque con su simple 'Hola', hace que se me pongan los pelos de punta y los nervios me coman viva. Realmente no sé por qué lo quiero como lo quiero. Pero si fuese necesario, se lo gritaría a cada persona que vive en este puto planeta.

A tu lado la vida es un poco mejor.

Sé que somos diferentes, que nos peleamos, que a veces ni siquiera nos hablamos, pero en el fondo ¿sabes lo que pasa?, que me cuesta mucho decirte que conocerte, que encontrarme contigo me cambio la vida, y ¿sabes que mas me cuesta decirte?, que me la cambió para bien. Yo muy pocas veces había tenido a alguien a quien querer de esta manera. ¿Sabes que más me cuesta decirte?, que quiero estar a tu lado aunque no pueda tocarte en la vida, que yo quiero seguir ahí a tu lado.

Un amor imposible.

Quiero que se haga realidad. Me gustaría levantarme por las mañanas sabiendo que te tendré durante las 24 horas del día, o dormirme sabiendo que te tendré al día siguiente. Día tras día, minuto tras minuto, segundo tras segundo. Llevo bastante tiempo así, pensando que sería de mi si algún faltases, no soy ni la primera ni la única que quiere estar al lado de esa persona todo el tiempo. No quiero irme y dejarte en el olvido, siempre serás la ilusión por la que yo vivo. Sin ti yo me muero, y necesito pensar en ti. Me gustaría aprovechar el presente viviéndolo contigo. Es que me siento rara, al echarte de menos, aun sabiendo que sin ti estoy perdida. Y nunca pienses que te llegaré a olvidar, ¿vale? lo bueno de esto, es que con solo verte sonreír puedo llegar a ser muy feliz.

Aún quedan esperanzas.

Yo no entiendo lo mucho que te puede llegar a importar alguien, es increíble ¿verdad? Como te comes la cabeza por él, te rayas, te entristeces, te haces mil preguntas y todas sin respuesta, porque ciertamente, el único que te las puede responder es él, pero nunca lo hará. Y no te lo puedes quitar de la cabeza, es insoportable pero a la vez fascinante. Querer estar con esa persona en cada cosa que haces y pensar “Ojalá estuviera ahora aquí, conmigo”. Es querer a alguien. Tienes miedo, miedo a perder a alguien que nunca fue tuyo, miedo a que te la quiten, miedo a no gustarle. Y por mucho que la gente intente entender lo importante que es para ti esa persona, no lo entenderán, jamás lo harán. Ahora el problema está en que esa persona se de cuenta de lo importante que es para ti, no es fácil, pero tampoco es imposible sigo pensando que poco a poco, con cada mirada, con cada gesto te darás cuenta de lo mucho que te quiero.

Te querré de todas formas.

Pasamos de un extremo a otro, no tenemos un término medio, nos queremos a morir y matamos por querernos. Me haces pararme en cualquier lugar para darme uno de esos abrazos que solo tú sabes darme. Puedo ser la persona más feliz del mundo, sólo con tenerme a mi lado, con hacerte sonreír. Puedo quererte los días pares y tú a mí los impares,o mejor puedo quererte todos los días sin excepción. Yo seré quién ponga las normas y tú quien se las salte. Yo puedo ser lo que tu quieras, porque lo seré por ti.

Ojalá me sorprendieras con un final feliz.

De tanto pensar y de meterme en la cabeza que entre tu y yo no va haber nada, me he dado cuenta que tengo que empezar a olvidar, que no puedo engañarme a mi misma, no me arrepiento de el tiempo que he estado enamorada de ti, ni de que lo siga estando, pero reconozco que durante todo este tiempo no he parado de pensar en ti y me he olvidado de otras muchas cosas, y que posiblemente ahora mismo no tendría este gran problema, el problema de olvidar algo que hasta ahora me parecía imposible hacer, pero se dice que el destino esta escrito ¿no? Pues todas las cosas pasan por alguna razón y espero que después de todo este tiempo consiga olvidarme de ti, aunque no quiera, aunque me cueste mucho tengo que intentarlo, tengo que llenar este vacío que me queda por dentro.

Sólo dime la verdad.

Después de pasar de mi dime que me echas de menos, que ya te has olvidado de mi, que de vez en cuando no echas de menos un abrazo, que la cama se te queda grande, que los suspiros se multiplican, que no hay principio sin final, que no puedes enamorarte de otra que no sea yo, que solo existe una perfección, que los errores son cosas del destino, que tu no eres el mismo si yo no estoy a tu lado, que se te acabaron las escapadas a media noche. Que me necesitas. No me cuentes excusas  porque ya me conoces lo suficiente y sé cuando una cosa es verdad y cuando no. Se que de los errores se aprende. Que el tiempo todo lo cura. Que no hay amor por parte de una sola persona. Que no hay mas miedo que el no respirar. Que lo que se da no se quita. Que la vida es menos puta si estoy a tu lado. Que no hay salida sin entrada. Que siempre ganan los malos. Que no hay instrucciones en ningún laberinto. Que las princesas no tienen corona. Que la tierra es redonda. Que los peces nadan y las aves vuelan. Que no se tiene nada si nada hay. Que antes de hablar hay que pensar. Y que para presumir hay que sufrir. Por eso te digo que vuelvas con la condición de que no me dejes, jamás. Ahora he aprendido que los que mas quieren son los que mas apuestan y en ocasiones los que mas pierden. Pero a veces merece la pena arriesgar si es por una buena causa. Eso si, dos veces puedo arriesgar, incluso tres, pero no te creas que voy a estar arriesgando toda la vida.

Ese es el problema.

- Te puedo asegurar que han pasado muchas chicas por tu vida.
+ Sí, han pasado bastantes. Pero todas tenían el mismo problema.
- ¿Cual era ese problema?.
+ Qué no eran tu.

Todo el tiempo estando ausente.

Que levante la mano quien nunca a llorado por amor, estoy casi segura de que nadie la levantaría, es curioso como una cosa que te puede llegar a hacer levitar al mismo tiempo puede hacer que te estampes contra el suelo y lo más curioso es que lo hace en cuestión de segundos, milésimas, vamos, el tiempo que se tarda en decir ”me gustaría dejarlo” o también esta la forma más cobarde, que es decir “Quiero que nos demos un tiempo”, en el último caso yo pienso: “¿Tiempo para qué?” y me responden: ”Para pensar sobre lo nuestro”, y ahí es cuando no hay que darles el gusto de decir un simple “ok”, ahí es cuando hay que contraatacar y decir ”Si me tienes que decir algo, suéltalo ya”, y depende de la respuesta viene el segundo paso, el llanto. El llanto no es algo tan malo si te pones a pensar, es una manera de expresar tus sentimientos, de no guardarlos para que en un futuro te hagan daño, sino que ya en el mismo momento te despides de esa experiencia en tu vida, claro, no hay porque afrontarla solo, siempre están esos amigos que nunca dejarían que derroches tus lágrimas por nadie, sino que siempre te dicen las típicas frases de: “Seguro que se arrepiente”, “Ese no era para ti, así que espera que aun hay algo mejor de lo que ha sido este”, “No vale la pena” y muchas más frases que usan para hacernos sentir mejor, pero no se puede, no se puede sentir bien cuando la persona a la que una vez le dijiste “Te quiero” ahora ni siquiera le digas "Hola" , no se puede estar bien pensando en que los besos que recibiste algún día y que tanto te gustaban los está recibiendo otra persona, pero ¿sabes que?  No te hace falta para seguir siendo una persona fuerte, una persona que no se rinde, hay que seguir hacia delante, con la cabeza bien alta y con una sonrisa de oreja a oreja, y nunca , nunca, pensar lo que podía haber pasado y no pasó, porque lo que pasó, pasó, y ya no se puede hacer nada al respecto, así que ya sabes, a sonreír que con llorar no se soluciona nada.

Tú eres una de esas personas que no se olvidan.

Esto te parecerá un poco raro, pero bueno. Es que, estás tan cerca siempre, pero tan lejos. Tengo guardado en la memoria cada una de las palabras que me dijiste,  esos momentos. A veces te recuerdo, y cuento las horas que me faltan para volver a verte, y pienso en que te voy a decir y que voy a hacer, para que te enamores de mi. Quiero que sepas que cuando estés triste yo lloraré contigo, y que cuando seas feliz, pues que me reiré contigo. Y que aunque pasen mil años, yo siempre voy a estar esperándote. Siempre. Porque no hay nadie en este mundo que te quiera tanto como yo, nadie.

Te quiero.

Te quiero. Primera persona del singular, presente de indicativo del verbo querer. Ocho letras, dos palabras. Miles de sentimientos. Puedes gritarlo, susurrarlo o simplemente pensarlo. Puedes demostrarlo día a día, o puedes tenértelo callado durante toda tu vida. Puede ser el amor de tu vida, puede ser un simple amor de verano. Estas palabras pueden hacerte la persona más feliz del mundo. También pueden joderte la vida.

Si faltas tú, todo me sobra.

Puede que no te des cuenta de que te miro, pero si que lo hago, mucho más de lo que crees, que cuando te veo, me siento la persona más tonta del mundo con solo pensar que tú también me estás mirando. Puede que sea insegura, que me ralle por todo, y por nada a la vez, pero no me culpes, con tantos palos que me he llevado tan solo me intento proteger a mi misma. Puede que cuando haya días en los que el bajón me invade, quiero que me digas que me quieres, y que todo se solucionará, aún sabiendo que no lo vas a hacer. Puede que quiera saber cada segundo de tu vida, pero es que tengo miedo de que te vayas. Puede que me ponga celosa al ver que hablas con otras, pero de verdad que no lo hago apropósito, no es mi culpa quererte. Puede que haya días en los que ni te hable, pero tan solo es por orgullo, si, ese puto orgullo que todos tenemos y que jode todo. Puede que me enfade por tonterías, pero porque quiero que me quieras como yo a ti. Puede que empiece a decirte tonterías, pero tan solo para que me calles con un beso. Puede que no te lo pida, pero quiero que me digas un 'te quiero' todos los días. Puede que me quede mirando tu labio inferior, pero tan solo porque me gusta, no lo puedo evitar. Puede que a veces me ponga demasiado cariñosa y muy empalagosa, pero es que tengo mis momentos, en los que tan solo me importas tú. Puede que más de una vez te haya dicho o hecho cosas de las que ahora me arrepiento, pero nadie es perfecto, tengo un genio que aveces ni yo misma aguanto. Puede que no sea de las que se pasan todo el día diciendo 'te quiero', pero te juro que quererte es lo único que hago.

Un ocho tumbado se queda demasiado corto.

Eres lo más bonito que tengo alrededor, la única razón que tengo para seguir luchando. Porque nadie podría hacerme sonreír como tu lo haces, nadie. ¿Sabes lo que me gusta de ti? Que cuando estoy realmente jodida apareces con esa sonrisa, me miras, me abrazas y eso me gusta, lo que más deseo en esta vida es verte feliz, y mucho mejor si estás a mi lado, porque si no es así sé que intentaré hacer lo imposible porque lo seas, porque eres más que todo. Aunque te repita lo pesado que eres muchas veces y sea yo la más borde del mundo, me encantas. Me encanta picarte solo para ver esa carita de enfadado que me encanta, y a pesar de que muchas veces no digo lo que debería decir, o digo lo que no debería, no te imaginas todo lo que te quiero. No puedo decirte cuánto porque no te llegaría a ser sincera, porque te quiero como se quiere a la persona con la que quieres estar las 24 horas de cada día, los 365 días del año, la persona que quieres tener a tu lado para siempre, para toda la vida. La persona de la que cada día que pasa depende más tu felicidad. Porque ¿crees que podría olvidarme de ti? Ya te lo contesto yo, no podría hacerlo nunca, porque me encantaría tenerte cada día a mi lado, levantarme y tenerte al lado en nuestra cama. Porque cuando estoy contigo me siento diferente, me siento especial, mejor persona y pienso que el mundo es mejor si tú estás a mi lado. Me despierto cada noche pensando en ti, en llevarte conmigo y reventarle la cabeza a todo el que se entrometa en lo nuestro. ¿Sabes que? Me gustaría que estuvieras conmigo, que vinieras con ese entusiasmo y con esa sonrisa, como si todo fuera posible.

No te pido mucho, con tú sonrisa es suficiente.

- Me encanta cuando sonríes.
- ¿Y eso? No lo sabía, ¿porqué?
- Porque tienes una sonrisa preciosa, además ese brillo en los ojos me mata, me pasaría el día mirándote.
- Pues vas a ver esa sonrisa por muchos años, tantos como tú estés a mi lado.

Y me da igual que digan que hice bien o mal.

Yo para ti, tu para mí. El uno para el otro. Sin terceras personas, sin segundas partes. Solo hay un principio que marca una historia increíble, y un final que nunca llega. Mi sonrisa, tu sonrisa. Mi felicidad, la de nosotros. Vida, la que me das tú. Y el resto, ya no lo sé, si perdí algo no me acuerdo. Gane todo cuando llegaste tú.

Esas cosas se notan.

-Te gusta ¿verdad?
+No, para nada ¿qué chorradas dices?
- No digo ninguna chorrada y lo sabes, y no solo te gusta sino que estás enamorada de él.
+Ala venga, deja de decir gilipolleces, yo no creo en el amor, ni creeré nunca.
-¿Ves como te intentas engañar a ti misma? Intentas ser dura, y normalmente lo consigues, pero con él no, cuando estás con él se puede ver perfectamente tu verdadera personalidad y tus verdaderos sentimientos.
+¿Y todo eso cómo lo sabes?
-No hace falta mas que mirarte a los ojos cuando lo miras.
+Tienes toda la razón, me encanta.

No hay mejor sitio en el mundo que a tu lado.

¿Para qué engañarme? ¿Para que decirte que si te vas lo superare? Claro que lo haré, algún día lo habré superado. Pero no quiero superarlo nunca. Quiero quererte cada minuto. Quiero amarte y que algún día tú también lo hagas, incluso más. No quiero empezar de cero, no quiero olvidar lo de atrás. Me quedaré lo bueno, y dejaré lo malo del pasado. No puedo decirte que si es lo mejor para mi que nuestros caminos se separen, lo asumiré. Porque no es cierto, me hundiré. No se quién, ni como, ni cuando saldré a flote. Pero prefiero no hundirme. No puedo permitir rendirme, no puedo dejar de intentarlo. No puedo dejar de quererte. No puedo ver como te vas, y no darme la vuelta y correr detrás de ti e intentarlo las veces que hagan falta para que no te alejes de mi. No quiero extrañarte, quiero que estés aquí.

Las miradas dicen a gritos lo que el corazón calla.

Muchas veces creemos que estamos bien o que somos fuertes y que hemos avanzado hasta que llega el día; el día que le ves. Inmediatamente sin pedir permiso tu cuerpo hace una bola en la garganta y otra en el estómago. Te pones nerviosa y recuerdas mil cosas en un solo instante, cosas buenas y malas. Curiosamente, siempre ganan las buenas. Es en ese instante cuando te entran unas ganas increíbles de acercarte a él, ya sea para gritarle o para preguntarle como le va, pero no, sabes que no puedes. No debes. La cabeza te traiciona y es lo que mas deseas en ese momento. Es ahí, en ese instante de reacción el cual no dura apenas mas de un segundo cuando sacas todas las fuerzas que llevas guardando para ese día, dejas de lado todo sentimiento bueno que se basa en recuerdos y piensas: 'Hoy no seré yo quien vuelva a ir detrás. Hoy no'.
Para que mentir, es muy fácil escribirlo pero la realidad es la siguiente: Unos días serás capaz junto con tu fuerza de ni siquiera mirarle y otros en cambio, caerás en tu piedra, tu piedra favorita al fin y al cabo.

Eres lo mejor de este puto mundo.

¿Qué me pasa? Estoy deseando verte, cuando se que puedes estar cerca te busco, si te tengo cerca, no puedo dejar de mirarte, si se que te voy a ver, me pongo nerviosa y me arreglo más de lo normal, no puedo mirarte directamente a los ojos sin ponerme roja y un millón de cosas mas típicas de alguien que te importa, pero nada típico si hablamos de un chico al que casi ni conoces. ¿Le estoy cogiendo muy rápido demasiado cariño? ¿Por qué me imagino mi vida junto a él? ¿Porque no puedo dejar de pensar en el ni un solo segundo? No tengo respuesta, solo se que estos son los primeros síntomas de esa conocida enfermedad llamada amor.

Esos momentos.

Ahora es unos de esos momentos en que le echas de menos a rabiar, más que nunca. Momentos en los que desearías tenerle cerca de ti, mirarle, besarle, acariciarle. Momentos en que imaginas esas miradas, esos gestos, esas sonrisas; todos esos momentos perfectos. Momentos en los que necesitas un abrazo, pero su abrazo. Momentos en los que le necesitas. Y sobre todo, momentos difíciles.

Eres lo mejor que me puede pasar en la vida.

El problema , no es que no te quiera, al contrario, te quiero demasiado. Por eso tengo tanto miedo. Silencios incómodos, miradas con sentimiento, besos que no se dan ,abrazos que lo dicen todo, bromas que duelen, momentos que pienso que te has olvidado de mi. Me dicen que lo olvide, que no vale la pena, que el nunca estará dispuesto a quererme tanto como yo a él, pero no puedo, pero también tengo miedo de que un día, esos silencios se vuelvan eternos, y no nos volvamos a hablar, que ahora esas miradas de complicidad, sean miradas de ''no te conozco'' de que esos besos, nunca lleguen a  existir, de que esos abrazos no digan nada, de que las bromas que duelen, los silencios que incomodan, hagan que lo nuestro nunca sea posible, y es que nunca he querido a nadie como lo quiero a él, pero ¿Por tonterías no nos volveremos a ver? ¿Por enfados míos , con razón, pero que él no entiende? ¿Por silencios incómodos en que nadie habla? ¿Por orgullo? Y me duele, y lloro, si lloro, porque él lo es todo para mi, pero creo que no sabe de verdad, todo lo que le llego a querer.