Siempre es poco tiempo.

Hace poco leí en un libro una frase que decía: -Si dos personas se quieren, nunca hay final feliz. Sí, es verdad. El 99% de las relaciones acaban en nada y en nada se quedan. Solo quedan recuerdos que depende como acabe todo, recuerdas o no.
De repente un día llega alguien sin ni siquiera esperarlo y pasa a ser la persona por la que te tiras en la cama por la noche sin parar de sonreír, cuando llegas de la calle después de haberlo visto. Con la que sueñas noche tras noche. En la que piensas toda la mañana en clase, no sabes lo que te pasa pero de repente dejas de oír y te quedas en blanco, solo esta él. Una ilusión, un sueño. 
Pasa el tiempo y cada día a su lado es especial. Te mueres de ganas de que llegue el fin de semana para verle. Te aferras a alguien que sabes aunque en ese momento no quieras pensarlo, que se irá. No sabes cuando pero lo hará. Algún día él no será el chico de tus sueños y tu vida volverá a dar un vuelco. 
Aún así arriesgamos todo, lo damos todo por amor. Se hace tan corto y tan intenso pase el tiempo que pase. No importa, da igual lo quieres y os prometéis un para siempre aunque no llegue a ser así.
Por eso siempre es poco tiempo.